Alguien dijo: "Los cuentos nos ayudan a enfrentarnos al mundo"

Era se una vez...

8-2-2015 a las 21:47:50 10.000 relatos y 10.000 recetas

10.001 relatos en tiocarlosproducciones

10.001 recetas en mundi-recetasdelabelasilvia

Translate

domingo, 5 de agosto de 2012

Cuento para los niños que no quieren comer


Había una vez una abuelita. Preparó la papilla para su nieto, pero el nieto no quería comer. Entonces la abuelita dijo:
-Ven rápido, palo, y pégale a mi niño.
Pero el palo dijo:
-Yo no le quiero pegar.
Entonces la abuela dijo:
-Fuego, fuego, ven rápido a quemar el palo.
Pero el fuego respondió:
-Yo no lo quiero quemar.
Entonces la abuela dijo:
-Agua, agua, ven rápido a apagar el fuego.
Pero el agua respondió:
-Yo no lo quiero apagar.
Entonces la abuela dijo:
-Buey, buey, ven rápido a beber el agua.
Pero el buey respondió:
-Yo no la quiero beber.
Entonces la abuela dijo:
-Cuchillo, cuchillo, ven rápido a matar el buey.
Pero el cuchillo respondió:
-Yo no lo quiero matar.
Entonces la abuela dijo:
-Herrero, herrero, ven rápido a fundir el cuchillo.
Pero el herrero respondió:
-Yo no lo quiero fundir.
Entonces la abuela dijo:
-Correa, correa, ven rápido a amarrar al herrero.
Pero la correa respondió:
-Yo no lo quiero amarrar.
Entonces la abuela dijo:
-Ratón, ratón, ven rápido a roer la correa.
Pero el ratón respondió:
-Yo no la quiero roer.
Entonces la abuela dijo:
-Gato, gato, ven rápido a comerte el ratón.
Entonces el ratón se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejarme comer.
Abuelita, tráe­me la correa que la roeré.
Entonces la correa se asustó y dijo:
-No estoy tan loca como para dejarme roer.
Abuelita, tráeme al herrero que lo amarraré.
Entonces el herrero se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejarme amarrar.
Abuelita, tráeme el cuchillo que lo fundiré.
Entonces el cuchillo se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejarme fundir.
Abuelita, tráe­me el buey que lo mataré.
Entonces el buey se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejarme matar.
Abuelita, tráe­me el agua que tengo sed.
Entonces el agua se asustó y dijo:
-No estoy tan loca como para dejarme beber.
Abuelita, tráe­me el fuego que lo apagaré.
Entonces el fuego se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejarme apagar.
Abuelita, tráeme el palo que lo quemaré.
Entonces el palo se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejarme quemar.
Abuelita, tráeme al niño que le pegaré.
Entonces el niño se asustó y dijo:
-No estoy tan loco como para dejar que me peguen.
Abueli­ta, tráeme la papilla que me la como.
Y en dos cucharadas se la comió toda.

164. anonimo (argelia- kabilia)

No hay comentarios:

Publicar un comentario