Las trece palabras

458. Cuento popular castellano

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime la una.

-La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las dos.

-Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

—Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las tres.

-Las tres, las tres trenidades. Las dos, las dos tablas de Moi­sés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las cuatro.

-Las cuatro, las cuatro evangelistas. Las tres, las tres treni­dades. Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

—Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las cinco.

-Las cinco, las cinco llagas. Las cuatro, las cuatro evangelis­tas. Las tres, las tres trenidades. Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las seis.

-Las seis, las seis candelorias. Las cinco, las cinco llagas. Las cuatro, las cuatro evangelistas. Las tres, las tres trenidades. Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para en­trar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las siete.

-Las siete, los siete gozos. Las seis, las seis candelorias. Las cinco, las cinco llagas. Las cuatro, las cuatro evangelistas. Las tres, las tres trenidades. Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las ocho.

-Las ocho, los ocho coros. Las siete, los siete gozos. Las seis, las seis candelorias. Las cinco, las cinco llagas. Las cuatro, las cuatro evangelistas. Las tres, las tres trenidades. Los dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las nueve.

-Las nueve, los nueve meses. Las ocho, los ocho coros. Las siete, los siete gozos. Las seis, las seis candelorias. Las cinco, las cinco llagas. Las cuatro, las cuatro evangelistas. Las tres, las tres trenidades. Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las diez.

-Las diez, los diez mandamientos. Las nueve, los nueve meses. Las ocho; los ocho coros. Las siete, los siete gozos. Las seis, las seis candelorias. Las cinco, las cinco llagas. Las cuatro, las cuatro evangelistas. Las tres, las tres trenidades. Las dos, las dos tablas de Moisés, que las puso el Señor para entrar en Jerusalén, amén. La una, la Virgen pura.

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las once.

-Las once, las once mil vírgenes. Las diez, los diez manda­mientos. Las nueve,...

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las doce.

-Las doce, los doce apóstoles. Las once, las once mil vírgenes. Las diez,...

-Que dime, buen hombre, las trece palabras dichas y retona­das. Que dime las trece.

-Las trece, los trece rayos del sol, que al diablo le partan en metá el corazón.

Aroones, Segovia. Felipa San ñivaro. 28 de marzo, 1936. 71 años.

Fuente: Aurelio M. Espinosa, hijo                                                            

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