Alguien dijo: "Los cuentos nos ayudan a enfrentarnos al mundo"

Era se una vez...

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domingo, 27 de mayo de 2012

El reparto del queso

Dos gatos consiguieron cierto día robar un queso, pero una vez llevada a cabo tal fechoría, tuvieron que ocuparse de un problema bastante difícil como era el de hacer un buen reparto.
Ninguno de los dos se fiaba de su compañero y, por fin, convinieron en llevarlo al juez, que era el mono, con objeto de que lo repartiese equitativamente entre ambos.
Empujando el queso para que rodara por el suelo, se dirigieron a casa del mono, el cual aceptó el encargo y, en el acto, pidió unas balanzas. Tomó un cuchillo y en vez de dividir el queso por la mitad, lo cortó de modo que uno de los pedazos fuera mayor que el otro. Puso ambos trozos en los platillos de las balanzas y al ver que uno se elevaba mientras el otro descendía, observó:
-No he cortado bien.
Y, tomando el trozo mayor, le dio un buen bocado.
-¿Qué haces? -gritó uno de los gatos.
-Quito un poco de ese lado para que no pese tanto -contestó el mono.
Y siguió comiendo tanto del pedazo mayor que, al fin, fué mucho más ligero que el otro.
Para nivelar el peso, mordió el que entonces era el pedazo mayor y así continuó, sucesivamente, en tanto que los gatos contemplaban doloridos el espectáculo, seguros de que el mono acabaría por comerse todo el queso. Entonces, uno de ellos, exclamó:
-Señor juez, dejadnos por lo menos lo que queda del queso qué ya lo repartiremos entre ambos como buenos amigos.
-¡De ninguna manera! -contestó el juez-. Eso sería causa de una pelea entre los dos y luego el Rey de los Animales me castigaría.
Y continuó comiendo, primero de un lado y después de otro y los dos gatos comprendieron que, al fin, no les quedaría nada.
-¡Mejor hubiera sido! -observó uno a su compañero -que hubiéramos hecho las partes nosotros mismos.
-¡Tienes razón! -contestó el otro lanzando un triste maullido.
Entretanto, el mono acabó de comerse el queso y al observarlo los dos gatos, uno murmuro:
-¡Vámonos en paz y, en adelante, procuremos dividir nosotros mismos nuestros asuntos sin acudir a este juez rapaz y glotón!


026. Anónimo (corea)

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